Tiramos los restos de lo que queda en el papel. De la historia que escribí y me imaginé en esa cercanía que hoy no me hace compañía. Si al fin y al cabo hay una pared de kilómetros que no nos dejan descubrir. Esa distancia que no congela ni abrevia su longitud, sino todo lo contrario: se extiende y se transforma en elástico cada vez más dilatado y prolongado. Y ahí es cuando esas seguridades y deseos de animarse se disuelven, porque haga lo que haga nada es suficiente. No alcanzan ni los minutos que no compartimos, ni las horas durante mi imsomnio, esperando dormirme con la almohada en la mano. Dando vueltas sin cerrar un ojo, obligándole a mi cabeza que deje de pensar en él. Y se hace cada vez más difícil cambiar de rumbo, colgarse la mochila y mirar otros horizontes. Porque las piedras que se cruzan son pequeñas agujas en mis pies, porque mis ojos se nublan con la lluvia de lágrimas que me rodean, porque mis manos están lastimadas de sostener una inútil ilusión, porque no dejo de extrañarte...
Y es que no tienes idea de todo lo que provocas en mi.!
Comentario: Creo que es momento de cerrar este ciclo que tanto tiempo me he negado a terminar, mañana es ultimo dia del año y quizas sea lo mas adecuado dejar de esperar y buscar nuevos horizontes esperando mejores cosas en esta vida.
♥Yanina